Mi abuelo decía…

Abro comillas… Los dichos, las enseñanzas, la sabiduría de antaño que tanta falta nos hace.

«Ah… si la vieillesse pouvez … si la jeunesse savait»   

«Contra el vicio de pedir está la virtud de no dar».   

«Uno nunca sabe lo que se le pierde hasta que lo encuentra».   

«Si la montaña viene hacia ti, ¡Corre! Es un derrumbe».    

«Pez que lucha contra la corriente muere electrocutado».

«La pereza es la madre de todos los vicios y como madre hay que respetarla».

«Mátate estudiando y serás un cadáver culto».

«Tener la conciencia limpia es síntoma de mala memoria».

«Yo no sufro de locura, la disfruto a cada minuto».

«El dinero no hace la felicidad la compra hecha».

«El que quiera celeste que mezcle azul y blanco».

«El que nace pobre y feo tiene grandes posibilidades de que al crecer se le desarrollen ambas condiciones».

«Errar es humano, pero echarle la culpa a otro es más humano todavía».

«Todo tiempo pasado fue anterior».

«Para ser exitoso no tienes que hacer cosas extraordinarias. Haz cosas ordinarias, extraordinariamente bien». 

«La experiencia es una dura maestra. Primero te hace el examen y después te da la lección».   

«Aquellos que te matan tus sueños es porque hace tiempo mataron los suyos».

«Toda persona inteligente suele quedar como un imbécil cuando se halla rodeada de imbéciles».  

«Uno de los países en que se nota más que se está fuera del país cuando se está fuera del país es este país».

«No hables. A menos que puedas mejorar el silencio».

«Aquel que es capaz de sonreír cuando todo le está saliendo mal, seguramente ya tiene pensado a quién echarle la culpa».

«La verdadera felicidad está en las cosas pequeñas: una pequeña mansión, un pequeño yate, una pequeña fortuna…»

«El que ríe último, es porque piensa más lento».

«Nadie es un fracaso absoluto. Siempre puede servir de mal ejemplo».

«El caballo es caballada, el puerco es porqueria… el ganado es ganancia». 

«Si las necesidades de un pueblo son de corto plazo, siembra trigo; si son de mediano plazo, planta árboles; pero si son de largo plazo, siembra educación»    

«Cuando yo muera, no me vengais a llorar, nunca estare bajo tierra, soy viento de libertad». (Ché Guevara)  

«La mejor lotería es el trabajo y la economía».

«No empieces a ahorrar cuando acabes de gastar; empieza a gastar cuando acabes de ahorrar».

«Me lo contaron y lo olvidé; lo vi y lo entendí; lo hice y lo aprendí»    

«A veces buscamos lo que siempre tuvimos en nuestro poder. Otras más tenemos cosas que no sabíamos que estaban ahí. Lo malo es el momento en que nos damos cuenta de ello».    

«Las cosas se ponen difíciles, solamente cuando no nos atrevemos a solucionarlas». (Séneca).    

«De lo mucho se reparte, de lo poco se comparte».

«Lo importante en la vida no está en hacer las cosas, sino en cómo se hagan».

«Todo lo que comienza en IRA, termina en vergüenza». (Benjamin Franklin)    

«Muchas personas no es que hagan mala cara. Es que son feas».

«Si cuentas pausada y tranquilamente de uno a sesenta habrás pasado un minuto de tu vida en el más puro y espontáneo estado de estupidez. ¡Inténtalo!».

«Hay cosas en la vida que no tienen precio y hay otras que sí lo tienen. Generalmente estas últimas son más divertidas».

«A mí de los chistes verdes lo que más me gusta es practicarlos».

«Hay cosas del pasado que están muy bien. Muy bien allá… en el pasado».

«El llanto de un niño es conmovedor, pero sólo cuando el niño es nuestro».

«Esclavo que no rompe sus cadenas es porque las merece».

«Más vale morir de pie que vivir de rodillas».

«La verdad os hará libres».

«Por muy bien que marche el pavo, también sirve para tamales».

«Piensa todo lo que dices, no digas todo lo que piensas».

«Cada ollita con su tapita».

«Mi abuelo decía… pregúntale a tu abuela».

«Los hijos de mis hijas mis nietos serán, los de mis hijos, serán… o no serán».

«¡¡Mientras más canas, más ganas!!»

«El ojo del amo, engorda el caballo…»    

«De esta vida sacarás lo que metas nada más….»    

«Recuerda: un hombre no vale por los triunfos obtenidos, sino por las veces que se ha levantado de sus fracasos».

«Si estás solo, puede ser por dos cosas, o eres inmensamente detestable o eres muy superior a los demás, piensa que eres esto último, así no te aborreces a ti mismo».

«Hay dos formas de viajar: en primera clase y con niños».

«Todo el mundo es talentoso, original y tiene algo que decir…»

«Paciencia, que nadie se muere en la víspera».

«No te fíes de las apariencias, el vidrio frió se ve igual que el vidrio caliente».

«Sólo es capaz aquel que convierte la voz del viento en un sueño hecho realidad por su propio amor».

«La esperanza es sentir que el sentimiento que tienes no será permanente».

«De la risa al llanto no hay más que un paso, el que nos lleva sobre el pie del que ríe».

«Dar es un placer que dura más que recibir, pues de los dos, el que da es el que lo recuerda más tiempo».

«No hagas a los demás el mal que no te gustaría que te hicieran a ti mismo. Tampoco les hagas el bien que sabes que ellos nunca te harían».

«La prudencia disimula mucho la ignorancia».

«No trates de hacer que los demás sean iguales a ti. Tú y yo sabemos que con uno como tú basta».

«Lo más seguro es que el pesimista, al final, tenga toda la razón, pero, mientras tanto, la pasa mejor el optimista».

«Muchas veces nuestros peores enemigos son aquellos amigos a los que solíamos hablarles como sólo se puede hablar a un amigo».

«Jamás en la historia de la moda se había levantado tan alto, tan poca tela para descubrir tanto de lo que tan urgentemente necesita mantenerse cubierto…»    

«Vive cada día como si fuera el último y un día tendrás razón».

«Cuidado. No tengas tu mente demasiado abierta que se te puede caer el cerebro».

«La diferencia entre la estupidez y la genialidad es que esta última tiene límites».

«Si estás discutiendo con un idiota, asegúrate de que el otro no esté haciendo lo mismo».

«El hombre es sueño, pulsión, afecto, desafecto, temor, pasión, todo lo contrario de lo que son las ecuaciones matemáticas.» – Ernesto Sábato

«Por la calle del ya voy se va a la casa del nunca». – Miguel de Cervantes

«Conocí un hombre interesante: no tenía principios».

«El reloj del cementerio se adelanta un poco».

«Desarrolla tus defectos, que son acaso lo más interesante de tu persona».

«Un hombre desnudo pesa más que vestido».

«He oído un ruido de cadenas que se rompen. Ha nacido un hombre».

«La vida es una cuestión de vida o muerte».

«-Soy abogado, soy ingeniero, soy…  -¿Y a mí qué? Eso sólo prueba que posees un diploma de limitación».

«Era tan mal actor, que lloraba de veras».

«Las mejores cosas sobre mí las han dicho mis enemigos».

«Poco importan los errores o las verdades en un gran autor».

«Las creencias religiosas tienen como origen la ley del menor esfuerzo».

«El optimista, es aquel que ve la luz al final del túnel y piensa en la salida. El pesimista, es aquel que ve la luz al final del túnel y cree que un tren viene hacia él».

«Hay que trabajar ocho horas y dormir ocho horas. Pero no las mismas».

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